El mensaje triple de la Cruz

El mensaje triple de la Cruz

Lucas. 23: 39-43.

Lucas, no fue discípulo llamado por Cristo, pues él fue discípulo de Pablo. Es el medico amado quien recuerda Pablo (Col 4:14  Os saluda Lucas el médico amado, y Demas.) Lucas él único libro que cuenta esta historia, sobre Jesús en la Cruz, y la conversación que tiene con los dos compañeros de Cruz.

Pablo lo llama colaborados. En Filemos 24 ".....Lucas, mis colaboradores" probablemente escrita en la misma época, se describe como compañero de tareas de Pablo, lo que sugiere que su ayuda en la obra del evangelio no ser limita a su profesión, de médico.

Pablo lo reconoce en sus últimos días de vida. Hay una referencia a él en lo que aparentemente fue uno de sus últimos mensajes de Pablo: "Solo Lucas está conmigo" 2 Timoteo 4:11.

Luc 23:39  Y uno de los malhechores que estaban colgados le injuriaba, diciendo: Si tú eres el Cristo, sálvate a ti mismo y a nosotros. Luc 23:40  Respondiendo el otro, le reprendió, diciendo: ¿Ni aun temes tú a Dios, estando en la misma condenación? Luc 23:41  Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas éste ningún mal hizo. Luc 23:42  Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. Luc 23:43  Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.

Desarrollo del tema

1. La burla a Jesús, la incredulidad, aun viendo, será parte de muchas personas, pues aun sufriendo, niegan al Salvador Jesús. Luc 23:39  Y uno de los malhechores que estaban colgados le injuriaba, diciendo: Si tú eres el Cristo, sálvate a ti mismo y a nosotros.

Las personas dudan, pueden ser dos aspectos, la realidad, tanta religiosidad, falsedad, engaños, que dudan y otros hasta aborrecen el mensaje de Jesús.

2. DIOS obro en la vida de uno de los compañeros de Jesús en la Cruz, pues dice grandes doctrinas, para toda una vida. Luc 23:40  Respondiendo el otro, le reprendió, diciendo: ¿Ni aun temes tú a Dios, estando en la misma condenación? Luc 23:41  Nosotros, a la verdad, justamente padecemos, porque recibimos lo que merecieron nuestros hechos; mas éste ningún mal hizo.

2ª. Este condenado reconoce su condición, que es la condición de todo ser humano.

1.1.      Reconoce la condición del hombre, son pecadores.

1.2.      Reconoce a Jesús, que esta injustamente condenado.

3. Lo que el ser humano debe de saber, y pedir a Jesús. Luc 23:42  Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino.

3.1.1. Este hombre reconoció 2 hechos importantes, en la doctrina de DIOS, que eran pecadores, y que Jesús, era un hombre, injustamente condenado.

3.1.2. Pero además reconoció a Jesús, como DIOS, como el único camino de salvación, para la vida eterna. “Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino” le dijo Jesús.

Un pedido necesario de ejemplo a todo ser humano, una verdad transcendental, una verdad ineludible, una oportunidad de ver a Jesús como vida y no como religión, un corazón verdaderamente sincero, arrepentido, que reconocía su condición de pecado, reconocía a Jesús como el único camino a DIOS, una verdad pues no se aprovechaba del momento, y este hombre crucificado, sinceramente se arrepiente de sus pecados, ante el único que podía salvarlo, no era religión, no era nadie más para poder dar vida eterna, era el único que pude hacerlo, es el único para tener vida, él es Jesús de Nazaret. 

4. La respuesta de Jesús da vida da vida eterna.    Luc 23:43  Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.

Acá se ve la promesa de estar al lado de nuestro Señor Jesús. Un pecador a su lado, arrepentido, y para la eternidad. Unas palabras pueden cambiar el presente eterno del ser humano, creer una decisión importante, pues nada debe de separarte de acercarnos a nuestro Señor.

Conclusión

Lo que el ser humano, en cualquier parte del mundo, debe de comprender la doctrina de la salvación y vida eterna, y es  el triple mensaje de la cruz, al ser humano

1.   Debemos de reconocer que todos somos pecadores, soy pecador.

2.   Debemos de aceptar a Jesús, el camino el único camino a DIOS, Jesús.

3.   Si de corazón nos arrepentimos y aceptamos a Jesús, como el único camino a DIOS, recibiremos la respuesta en nuestras vidas, de la vida eterna.  

Estamos al Servicio de DIOS a su Servicio. Comenten por favor. DIOS los bendiga.

Teología de la prosperidad versus Teología de Espiritual

Teología de la prosperidad versus Teología de Espiritual

Comerás con el sudor de tu frente

Debemos decir que la prosperidad del ser humano, es buena, siempre y cuando venga acompañada, del esfuerzo, dedicación, con el sudor de nuestra frente, y no de algún capricho, engaño o aprovechamiento  de nuestro prójimo.

Pero cuando la Teología de la prosperidad, quiere poner a DIOS como el genio de la lámpara maravillosa, (Le pides, y nos debe de dar) rayando así otra vez más, con el engaño a un pueblo, siendo pues la Teología de la prosperidad quien es la que engaña, se hace una herejía más, y no una sana doctrina.

El problema de la Teología de la prosperidad es que hace que seamos ambiciosos, angurrientos, y dejemos a DIOS que por medio de su Hijo Jesús no enseño, que debemos de buscar el reino de DIOS y su justicia en primer lugar y que todas las cosas nos vendrán por añadidura.

Dos bendiciones ¿En cuál de ellas nos encontramos?

Las promesas de DIOS se deben de ver desde dos perspectivas, o dos promesas, una de ella es la promesa del Antiguo Testamento, y la otra es la promesa del Nuevo Testamento, pues para un cristiano es mejor dar que recibir.

La promesa del Antiguo Testamento DIOS promete a su pueblo hebreo de llevarlos a una tierra que fluye leche y miel, (riqueza) y ella será de bendición para su pueblo, esta bendición que se cumple, cuando siendo esclavos en Egipto, Moisés por medio de DIOS, los saco de la esclavitud a una tierra libre, en el Medio Oriente donde fluye leche y miel, y los hebreos hoy judíos, reciben esta bendición, la de ser libres y tener una posesión, una Nación, esta es la bendición material del Antiguo Testamento, al pueblo de DIOS.

Pero en el nuevo Testamento es diferente la bendición, es espiritual, en ella se ofrece una vida eterna, una nueva vida y un mundo nuevo, por medio de Jesús, a sus hijos o discípulos.

¿Y los cristianos no seremos ricos? 

La dedicación, el estudio, el trabajo, serán necesarios, para esforzarnos a superarnos, ya que la condición del cristiano es espiritual, y no debe de estar metido en nada malo, debe ser honrado, fiel, pagar su impuestos, no explotar a nadie, hacer el bien al prójimo, no estafar, no robar, no aprovecharse del prójimo si no al contrario servirlo; y esto nos hace contrario a este corrupto mundo, que está dirigido satanás y va camino a su destrucción pero esto no debe de ser de excusa para no hacer nada por este mundo, o servirle en su restauración, pues somos llamados para administrar bien.  

¿Cómo podemos recibir la bendición espiritual?

Para poder recibir esta bendición espiritual, es necesario reconocer a Jesús como Señor y Salvador, y como el Hijo de DIOS, reconocer también nuestra condición humana, de que somos pecadores, desde que somos concebidos en el vientre de nuestra madre y debemos de pedir en oración, a Jesús, nos perdone de todo pecado, de nuestra vida.

El trabajo y responsabilidad será siempre, debemos de trabajar, esforzarnos para recibir la bendición del esfuerzo, pues es mejor ganarse el pan con el sudor de la frente, que con el sudor de otros.

Podemos reconocer 2 tipos de bendición Espiritual.

    1.   La bendición terrenal o bendición material, para el pueblo que salió con Moisés y                 residió en Medio Oriente, en una nueva Nación.

1ª. Podemos llamarlo también la bendición del Antiguo Testamento

2.   La bendición Espiritual. Es para quienes creen en Jesús, como su Señor y Salvador.

2ª. Podemos llamarlo también la bendición del Nuevo Testamento.

Conclusión: Existe 2 tipos de bendiciones de DIOS.

1. La bendición del Antiguo Testamento, que viene a ser la bendición material, terrenal.

2. La bendición del Nuevo Testamento, que será la bendición espiritual, la de cielo nuevo tierra nueva y vida eterna.

Luc 15:7  Les digo que así es también en el cielo: habrá más alegría por un solo pecador que se arrepienta, que por noventa y nueve justos que no necesitan arrepentirse.

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